China, el imperio de los sentidos
Pekín – El latido de la historia
Ciudad de emperadores, templos milenarios y plazas infinitas. Pekín respira historia en cada rincón: la majestuosidad de la Ciudad Prohibida, los ecos silenciosos del Templo del Cielo, los hutongs que guardan historias y la modernidad que se eleva entre rascacielos de arte.
Una clase privada de tai chi al amanecer o una cena exclusiva en un patio tradicional iluminado por faroles tibetanos revelan una ciudad que se convierte en algo más cuando cada momento se diseña para ti.
El horizonte sin fin
Gran Muralla
Más que un símbolo, es una obra que atraviesa siglos y paisajes. Entre colinas y valles, sus muros se pierden hasta donde alcanza la vista.
Momento de compartir
Imagina llegar a un tramo remoto en vehículo privado, donde te espera un chef para preparar un almuerzo gourmet con vistas infinitas. Comer sobre la muralla, con el viento y la historia como compañía, es una experiencia que pocos han vivido.
Alojamiento sugerido: Commune by the Great Wall, una colección de villas de autor escondidas en la montaña, con acceso exclusivo a tramos casi secretos de la muralla.
Guardianes de terracota
Xi’an
Cuna de dinastías y punto de partida de la Ruta de la Seda. Xi’an custodia el icónico Ejército de Terracota, miles de figuras en formación eterna frente a la eternidad.
Explora zonas restringidas en compañía de un historiador o conservador y descubre detalles invisibles para el resto de visitantes, antes de cerrar el día con un espectáculo de danza tradicional solo para vosotros.
Montañas que tocan el cielo
Guilin
Un paisaje que parece pintado con pinceladas de niebla y jade. Sus picos kársticos y aguas tranquilas componen una de las postales más bellas de Asia. Disfruta de un crucero privado por el río Li, donde cada curva revela nuevas montañas y aldeas detenidas en el tiempo.
Entre ríos y arrozales
Yangshuo
Naturaleza en estado puro y vida local que late al mismo ritmo. Recorre arrozales en bicicleta, cruza el legendario Puente de los Diez Mil Años y navega en balsa de bambú por el río Yulong.
Experiencia de otro tiempo
Cuando cae la tarde, la luz se mezcla con las linternas rojas y la música tradicional, en una cena íntima que parece sacada de otro tiempo.
El pulso del futuro
Shanghái
Luces de neón, rascacielos que acarician las nubes y un dinamismo que no descansa. El Bund, con sus fachadas coloniales, se enfrenta a la silueta futurista de Pudong. Disfruta de una cena privada en una terraza panorámica mientras la ciudad se ilumina a tus pies: un instante donde tradición y modernidad se encuentran en perfecta armonía.